21 noviembre, 2024

La fuerza de China en el mundo actual

Recientemente tuve la oportunidad de visitar en Shanghai el museo que recuerda el Primer Congreso, el fundacional, del Partido Comunista de China, en el año 1921.



Independientemente de las ideas o ideologías que puedan tener los ciudadanos de cualquier país del mundo, creo que vale la pena que todos aquellos que estén interesados en China, y viajen al país, hagan una visita a este Museo. 

Es una buena oportunidad para conocer hechos concretos de la historia relativamente reciente de China y para comprender algunas actitudes de sus autoridades y ciudadanos. 

En el Museo se muestra, de forma detallada y dinámica, cómo una China atrasada, semifeudal y semicolonial, sufrió desde mediados del siglo XIX todo tipo de ataques, invasiones y humillaciones y fue obligada por la fuerza de las armas a aceptar una serie de tratados desiguales que violaron la soberanía del país, con territorios chinos bajo el control absoluto de fuerzas extranjeras. 

Fue como si algunos barrios de Montevideo, Madrid u otras ciudades de nuestro mundo de habla hispana hubieran quedado, en pleno siglo XX, y durante décadas, bajo el control de potencias extranjeras, con sus propias leyes, sistema judicial, monedas, policía, etc. Aparte de eso están las "compensaciones" que el país se vio obligado a pagar a potencias extranjeras.

La siguiente foto que figura en el museo es muy significativa:



Debido a la mala calidad de la fotografía que tomé, describo a continuación su pie de foto que dice "En septiembre de 1901 el gobierno (de la dinastía) Qing, fue forzado a firmar el 'Protocolo Bóxer', uno de los más humillantes tratados desiguales, con Gran Bretaña, Estados Unidos, Alemania, Francia, Rusia, Japón, Italia, el Imperio Austro-Húngaro, Holanda, Bélgica y España".

Casi medio siglo después de que se tomara esa foto, se establece la República Popular China y tras un largo período de duro trabajo ésta se ha transformado en un Estado fuerte al cual ya nadie puede humillar. 

A veces, para demostrar, en este caso, la importancia de China en el mundo de hoy, en lugar de usar cifras interminables, es mucho más fácil ver algunos ejemplos sencillos. Y para ello me voy a referir a la participación del presidente de la República Popular, Xi Jinping, en dos recientes acontecimientos internacionales que tuvieron lugar en Lima y en Río de Janeiro.

En menos de diez días, durante las reuniones de la APEC en Perú (15-16 de Noviembre) y del G20 en Brasil (18-19 de Noviembre), y las visitas oficiales realizadas por el presidente Xi Jinping a ambos países, el lider chino mantuvo encuentros con presidentes y/o jefes de gobierno de 17 países:

Del continente americano (en orden alfabético):

 Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Estados Unidos, México y Perú

De Europa (en orden alfabético):

 Alemania, Austria, Francia y el Reino Unido

De Asia y Oceanía (en orden alfabético):

 Australia, Japón, Nueva Zelanda, República de Corea, Singapur y Tailandia

Y antes de salir de Beijing, y desde el 1 de noviembre, Xi Jinping recibió visitas oficiales de los presidentes de Indonesia e Italia, y de los primeros ministros de Malasia y EslovaquiaO sea un total de 21 encuentros con mandatarios extranjeros en un plazo de tres semanas.

Entre los dirigentes con los cuales se entrevistó se incluyen a responsables políticos de gobiernos de "izquierda", de "derecha" o de "centro"; gobiernos declaradamente anticomunistas como es el caso del de Javier Milei, o con un actitud muy agresiva hacia China, como Estados Unidos o el Reino Unido.




Se podrá estar de acuerdo o no, en parte o completamente, con la política exterior o el sistema de la República Popular, pero lo que sí está claro es que -les guste a algunos o no- China ya no puede ser ignorada, ni mucho menos humillada, en el mundo actual.

También ha quedado claro en esos encuentros del presidente Xi Jinping, el deseo chino de un mundo multipolar  donde se puedan mantener relaciones y contactos "normales" a muchos niveles, independientemente de las diferencias o discrepancias ideológicas y políticas que puedan existir. 

Alguna vez he puesto los casos de las relaciones Uruguay-China o Chile-China como ejemplos de que la ideología o política de los diversos gobiernos que han tenido esos países no ha afectado los lazos con la República Popular. También es verdad que a eso no sólo ha contribuido China sino también los diferentes gobiernos -insisto, de diferentes tendencias políticas- que han tenjdo y tienen los dos países sudamericanos.

Las cosas en Uruguay, sin embargo, podrían cambiar si en las elecciones del próximo domingo triunfa el candidato de la fuerza de "izquierda" Frente Amplio, paradójicamente menos entusiasmada en lo que tiene que ver con las relaciones con China que el actual gobierno de "centro" o "centro-derecha" del presidente Luis Lacalle Pou.

Pero eso ya es otra historia.....

Como resumen, a veces hay cosas de China que parecen muy difíciles de entender o explicar, pero "pequeños" detalles como la visita a un museo o en "recuento" de las entrevistas mantenidas por el presidente Xi Jinping en estas últimas tres semanas pueden ayudar a comprender muchas cosas.

Como dice el refrán, "una imagen vale más que mil palabras", pero en este caso me "he visto obligado" a escribir estas líneas, ante la imposibilidad de publicar 21 fotos de las entrevistas mantenidas por el presidente chino.

PD: las entrevistas han sido tantas, que pido disculpas si se me ha pasado citar a algún país.

@PabloRovetta        

29 septiembre, 2024

El 75º aniversario de la fundación de la R. P. China. Testigo privilegiado de su historia

 El 1º de Octubre se cumple el 75º aniversario de la fundación de la República Popular China. Dentro de unos meses, pero ya en 2025, podré celebrar los 50 años desde mi llegada al país.

El próximo año será muy importante para mí, no sólo por ese medio siglo de relación con China, sino porque llegaré a mi edad de jubilación.

Para entonces podré decir que tuve el privilegio de haber sido testigo directo de más de las dos terceras partes de la historia de la República Popular.

Desde la China del Presidente Mao he podido ver los cambios y el desarrollo experimentado hasta la actual China bajo la dirección del Presidente Xi Jinping.

Mientras voy preparando ese aniversario, comienzo hoy compartiendo el artículo publicado por "China Hoy", a la cual agradezco sinceramente.

Espero que sea de interés para los lectores de estas reflexiones cada vez más "orientales", en el doble sentido que le doy a la palabra.

El artículo se puede leer aquí


@PabloRovetta





21 septiembre, 2024

75 años atrás Mao Zedong proclamó al mundo que el pueblo chino se había puesto de pie

 Es común entre algunos autodenominados "expertos" en China, entre organizaciones cercanas a China e incluso en medios de prensa del país el indicar que la famosa frase de Mao Zedong "el pueblo chino se ha puesto de pie" fue pronunciada el 1º de octubre de 1949, cuando se fundó la República Popular China.

En realidad esa frase la pronunció Mao un 21 de septiembre, hace hoy 75 años,  el día en que se celebró la primera sesión del llamado Consejo Consultivo Político del Pueblo Chino (CCPPCh), el cual cumple hoy ese mismo aniversario.


Escudo del Consejo Consultivo Político del Pueblo Chino que presidió la Sesión del 21 al 30 de septiembre de 1949

Dicha reunión tuvo lugar del 21 al 30 de septiembre y es de importancia histórica en la Republica Popular China que iba a establecerse un día después en la plaza de Tiananmen.

La sesión se celebró en el complejo de Zhongnanhai, y la misma aprobó el establecimiento de la República Popular China, su bandera, himno nacional, capital del país y calendario (se adoptó oficialmente el calendario gregoriano) y al mismo tiempo eligió a los integrantes del Gobierno Popular que iba a fundarse.

Es entonces que el nombre de Beiping 北平 se cambia por el de Beijing 北京. Cuando la Revolución de 1911 la capital china se había trasladado a Nanjing 南京, y Beijing -al dejar de ser capital- retomó su nombre de Beiping.

El discurso de apertura de la sesión pronunciado por Mao Zedong se tituló "El pueblo chino se ha puesto de pie", y en el mismo indicó:

"Estimados señores delegados, tenemos un sentimiento común y es el de que nuestro trabajo quedará escrito en la historia de la humanidad y demostrará que el pueblo chino -representante de la cuarta parte de la humanidad- se ha puesto de pie".

Este fue el origen del acto de proclamación de la República Popular China que tuvo lugar el 1º de Octubre en la plaza de Tiananmen.

@PabloRovetta

01 agosto, 2024

CHINA Y VENEZUELA

Las elecciones que tuvieron lugar el pasado 28 de julio en Venezuela han creado conflictos y polémicas tanto en lo nacional como en el aspecto internacional, en especial en nuestra América Latina y el Caribe.




China no ha estado ajena a las mismas; más al contrario, no se deja de recordar que fue uno de los pocos países que felicitó, de forma casi inmediata, al presidente Nicolás Maduro.

31 marzo, 2024

La apasionante historia de la "Biblioteca China" en Uruguay

En el año 1954, en un artículo publicado por el diario EL PAIS de Uruguay, se indicaba que “Montevideo tiene el mayor tesoro cultural de una civilización que tiene cinco mil años, y casi nadie lo sabe”.  Hoy podemos decir que “Montevideo tuvo el mayor tesoro cultural de una civilización que tiene cinco mil años” y los que pudimos saber los detalles de esto -no lo suficientemente conocidos y destacados en la historia de las relaciones entre Uruguay y China- debemos agradecerle al investigador y escritor uruguayo Alfredo Alzugarat por su obra, publicada en el 2014,  “De la dinastía Qing a Luis Batlle Berres-La historia de la Biblioteca China en Uruguay”

Lo que Alfredo Alzugarat llama correctamente la “Biblioteca China” es la “Bibliothèque Sino-Internationale” (中国国际图书馆) (BSI) establecida en Ginebra en 1932 y que comenzó a ser  trasladada íntegramente de forma secreta a Uruguay en 1951. Posteriormente, en 1993, cinco años después del establecimiento de relaciones diplomáticas entre Uruguay y la República Popular China, su núcleo principal se envió a Taiwán, también en el mayor de los secretos.

La BSI fue una biblioteca y agencia cultural cuyo objetivo era mejorar el conocimiento de la vida y la cultura china en todo el mundo. Llegó a tener más de 200.000 volúmenes de libros -algunos de ellos verdaderas joyas bibliográficas de la dinastía Ming, aparte por supuesto de la posterior dinastía Qing- además de pinturas, caligrafías, fotografías o instrumentos musicales.

Toda esta historia está rodeada de acontecimientos y personajes dignos de un libreto de intriga, suspenso, guerras y espionaje, y me es imposible hacer el más mínimo de los resúmenes en este blog. Además, no son pocos los hechos y el papel jugado por algunos de sus principales actores, que aún no están lo suficientemente claros, o sobre los cuales existen diferentes versiones o preguntas sin respuesta. Es posible que en próximas entradas de estas "Reflexiones Orientales" me centre en alguno de esos hechos, que pueden además ser encontrados en el libro de Alfredo Alzugarat.


En todo caso, el objetivo ahora es anunciar que del 11 al 13 de abril tendrá lugar en Ginebra el coloquio internacional “Promoción de la cultura y de las artes chinas, 1930-1950. Alrededor de la Biblioteca Sino-Internacional de Ginebra” en el cual participarán importantes académicos e investigadores de la República Popular China, Taiwán,  Suiza, Francia, Estados Unidos... y Uruguay.  

En efecto, Alfredo Alzugarat es una de las personalidades invitadas a este coloquio, y será la primera vez que el tema de la Biblioteca China en Uruguay sea tratado en un acto académico internacional. Antes de su viaje a Suiza tuvimos la oportunidad de entrevistarle en estas “Reflexiones Orientales”, con el deseo de que esta entrevista, y la posterior realización del coloquio de Ginebra, ayude a dar a conocer y aclarar muchos aspectos de esta apasionante história. A continuación, el texto completo de la entrevista:


-             La primera edición de tu libro se publicó en el año 2014; y en el 2019 publicaste en la Revista de la Biblioteca Nacional un ensayo titulado “La Biblioteca Nacional y la Guerra Fría: El episodio de la Biblioteca China” ¿Cuándo, cómo y por qué surge tu interés por investigar este tema, por cierto tan apasionante?

 -            Yo trabajaba en el Departamento de Archivos e Investigaciones Literarias de la Biblioteca Nacional de Uruguay (BNU) y había elegido estudiar el Archivo del profesor y escritor José Pedro Díaz. Su Archivo contenía, entre otras joyas, un diario de juventud, manuscrito, que se vio necesario transcribir por la numerosa información que podía poseer con respecto a la Generación del 45, una de las más importantes de este país y de la que Díaz fue un destacado integrante. En determinado momento tropecé con la sigla “BSI” de la que no tenía la menor referencia. Por internet supe de su significado. Allí empezó todo. Yo sabía que una biblioteca china había pasado por la BNU pero no tenía idea de su importancia. Un viejo funcionario me dijo que hablara entonces con Carlos Maggi, otro gran integrante de la Generación del 45 y muy amigo de José Pedro Díaz. El testimonio de Maggi, ya nonagenario pero de brillante lucidez, fue el mas firme punto de partida. Después, a partir de mi interés en el asunto, me fue entregada toda la documentación de la BSI que aún permanecía en la BNU.

 

 -            ¿Cuánto tiempo te llevó la investigación, cuáles fueron tus principales fuentes y tus mayores dificultades?

 -            La investigación para que se concretara mi libro duró alrededor de dos años pero luego de la publicación, continuó hasta ahora, siempre cosechando nuevos datos. Las principales fuentes, además de Maggi y de lo que yo llamé Archivo de la BSI, que contiene toda la documentación que quedó aquí en Uruguay, fue también muy importante para mí el Archivo Histórico Administrativo de la BNU, donde se conservan todas las gestiones de la misma, incluido los informes de los directores a los ministros de Cultura. El asunto me obsesionó desde un principio y, más allá de comprender su magnitud y enorme significado, yo quería llegar al origen de esta biblioteca y porqué había llegado a Uruguay. Eso me llevó a investigar la vida de su fundador, Li Yu Ying, cuyo nombre se me aparecía por todas partes y vinculado a campos muy diferentes, el anarquismo chino, la importancia de la soja, la caída de la monarquía. Más me internaba en ese laberinto, más apasionante me resultaba. Mi mayor dificultad era no saber chino aunque también tuve que valerme de algunos compañeros del Departamento que conocían a profundidad el idioma francés, que era la lengua franca que utilizaban los chinos por los años 50 del pasado siglo. Fue decisiva la ayuda que me prestó el arquitecto chino-uruguayo Cheung Koom Yim, quien en su juventud había sido usuario de la BSI, y que me transcribió al piyin los numerosos nombres propios chinos, diferentes según el idioma occidental desde el que se los expresara, y que provocaban en mí una gran confusión. Debí estudiar también mucha historia de China, fundamentalmente desde los albores de la dinastía Qing hasta la Revolución.

 

Alfredo Alzugarat

 -            Es interesante que en el año 1950, cuando con excepción de Suiza y los países nórdicos en Europa Occidental, prácticamente ningún país occidental reconocía a la República Popular China, y mucho menos en todo el continente americano, la BSI piensa en Uruguay para el traslado de la biblioteca completa. Dentro de América Latina, además, había muchas naciones con una larga historia de relaciones con el mundo chino, desde siglos atrás, y con relaciones diplomáticas con la llamada “República de China” establecida en Taiwán. Es por ejemplo el caso de Argentina. Lo mismo pasaba con otros países de habla francesa en Europa  (Bélgica o Francia) o incluso con la misma España. ¿Cuál o cuáles fueron los factores que llevaron a la BSI hasta Montevideo?

 -            Este es un punto que merece todavía una mayor profundización. El mayor relacionamiento de Li Yu Ying con Occidente se realiza a través de Francia, allí estudió en su juventud, fundó una fábrica de derivados de la soja, creó numerosas instituciones culturales y científicas de intercambio entre ambos territorios, soñó con unir el enciclopedismo chino con la Enciclopedia de Diderot, fundó la Universidad Franco China con sede en Lyon, etc, etc. La lógica hubiera sido que la BSI fuera trasladada a Francia que, aparte de estos antecedentes y de la cercanía geográfica, reconoció al nuevo gobierno chino recién a mediados de los años 60. Informaciones recientes, posteriores al libro, muestran que hacia 1949, cuando tras la Revolución surge la necesidad imperiosa de trasladar la BSI, esta tenía por destino la ciudad de Nueva York, donde Li Yu Ying y sus allegados poseían un edificio en el Riverside, a orillas del Hudson. Hubo prensa neoyorquina que daba como un hecho inmediato el traslado de la BSI a Nueva York. Con respecto a Latinoamérica, una antigua funcionaria de la BNU, que trabajó como oficinista en la BSI, me aseguró que la Biblioteca había sido ofrecida a Argentina, donde había una embajada de China, pero que Perón la había rechazado. Nunca pude obtener la menor comprobación de sus dichos. A medida que ha ido avanzando la investigación me he ido convenciendo y reafirmando que había una necesidad de ocultarla, de esconderla ante el mundo y sobre todo, ante el nuevo gobierno chino. Los hechos eran tan recientes que Taiwán tampoco ofrecía seguridad para que se la llevara allí. Uruguay, en cambio, reunía todas las condiciones: nunca había tenido relaciones con China y poseía en aquel momento un entorno de estabilidad política y económica que les brindaba la deseada seguridad de que nadie la reclamaría. Prueba de lo que afirmo es la llegada de la BSI al puerto de Montevideo sin aviso público. Según Maggi, Li Yu Ying exigía que todo debía realizarse dentro del mayor secreto posible. También por esta razón se la inauguró oficialmente recién en 1967, cuando Uruguay establece relaciones diplomáticas con Taiwán,16 años después de haber llegado al país y de permanecer oculta en sótanos de la BNU.

 

-             En tu libro indicas: “Esta es la historia de una biblioteca que quizás nunca debió haber llegado a Uruguay, y es también la historia de una biblioteca que nunca debió haberse ido de Uruguay” ¿puedes explicarnos esta reflexión?

-            Bueno, con esa oración quise demostrar lo paradójico de la situación, rayana con lo absurdo incluso. Estaba fuera de toda lógica que la BSI llegara a Uruguay y permaneciera aquí por más de 40 años,pero quienes impulsaron de manera entusiasta su acogida, (creo que Maggi fue el principal impulsor de la misma) tenían la firme esperanza de que la BSI permaneciera para siempre en Uruguay. Basta leer los documentos a través de los cuales se le otorgó personería jurídica, las trabas legales ante una posible intención de retiro de la misma, etc. para convencerse de que la idea era tenerla para siempre del mismo modo que hoy los más importantes museos europeos poseen tesoros culturales de grandes civilizaciones del pasado. De haberse concretado esta ilusión, la permanencia de esta Biblioteca hoy en Uruguay sería de enorme importancia dado el nivel que ha alcanzado el intercambio económico principalmente, pero también cultural, con la China Popular.


 -            También te preguntas ¿cómo comprender el interés del Estado uruguayo en esta biblioteca, todos los gastos que se pagaron, sobre todo cuando la biblioteca nunca pasó a ser propiedad del Estado? ¿Cómo lo explicarías?

-            En su mayor parte esto está contestado en la respuesta anterior. Uruguay, en el comienzo de los años 50 del pasado siglo, estaba pasando por una etapa  de auge y por un momento debió asomar la idea de que todo le era posible. Éramos la Suiza de América, había prosperidad económica, éramos hasta campeones mundiales de fútbol. (Aún hoy se recuerda esa época como “la de las vacas gordas”). Entonces se pensó que hasta era posible darle refugio y poseer tesoros culturales de una civilización milenaria como la China y hasta participar activamente de la Guerra Fría, evitando que esos tesoros “cayeran en las garras o el zarpazo del comunismo internacional”.


 -            Tu dices que “es improbable que China Popular estuviera al tanto del asunto” (de la presencia en Uruguay de la BSI) y que este tema no fue uno de los puntos tratados durante las negociaciones para el establecimiento de las relaciones diplomáticas entre Uruguay y la República Popular China. También destacas que tampoco parece que la embajada de la República Popular pusiese mucho interés en la BSI cuando aún estaba completa en Uruguay. ¿Es así? ¿A qué lo puedes atribuir?

 -            Yo no tengo suficiente información sobre el interés que pudo o puede tener la República Popular de China sobre la BSI. En el transcurso de la investigación, tuve ocasión de acceder, vía mail, al contador Enrique Iglesias, que desde su jerarquía de canciller del Uruguay fue quien llevó adelante el establecimiento de relaciones con China Popular a mediados de los años 80, inmediato a la restauración democrática. Me aseguró que él conocía de la existencia de la BSI, que pensaba que la misma podía ser una condicionante para el establecimiento de relaciones, pero que nada de eso sucedió. Hoy digo también que semanas antes, el director de la Biblioteca Nacional, Carlos Liscano, me contó que había tenido un encuentro ocasional con el contador Iglesias y que al mencionarle mi investigación, Iglesias le había afirmado que la BSI había sido uno de los puntos de negociación para el establecimiento de las relaciones. Al escribir el libro, yo contaba sin embargo como única prueba documental con el mensaje escrito de Iglesias y opté por dejar entre paréntesis toda otra versión del asunto. Puede ser algo para profundizar.   

 

 -             Tengo entendido que la BSI no fue traslada de forma completa a Taiwán, y que aún quedan piezas en la Biblioteca de Montevideo. Estas piezas, ¿están organizadas? ¿qué tipo de piezas son? ¿Tienen un espacio especial donde aún pueden ser visitadas por el público en general? ¿Podrían seguir siendo un elemento de ayuda para todos aquellos interesados en la cultura china?

 -            Taiwán, a través de la Oficina de Negocios que aún la representaba tras la ruptura de relaciones, gestionó para llevarse todos los libros clásicos de la Antigüedad China, el corazón de la BSI,principalmente las enciclopedias elaboradas en los comienzos de la Dinastía Qing. Esto significaba el 65% dela BSI. El resto, que incluía los libros donados por la Sociedad de Naciones, objetos artísticos como pinturas, tapices, esculturas, instrumentos musicales, fotografías, una colección de dibujos de niños chinos,etc., aún permanecen parcialmente en la BNU. La desidia, la falta de control y de interés, son razones dolorosas que busco para explicarme como la mayor parte de lo que quedó ha desaparecido. Basta para ello comparar el listado de lo que se donó al momento del retiro de la BSI y lo que aún se encuentra. Hoy, en la Sala de Materiales Especiales, se conserva un armario con toda la documentación, la colección completa de dibujos de niños y otras piezas de la BSI que aún permanecen. En la entrada de la Sala, a la vista de cualquier persona, pueden apreciarse tapices, pinturas, muebles, dos instrumentos musicales, un ábaco. Los miles de libros de la sociedad de Naciones también se conservan aunque no en su totalidad. Para el acceso a este material se exige una autorización especial de la Dirección de la BNU y credenciales de investigador.

  

-             El coloquio que tendrá lugar en Ginebra va a concentrar a destacados estudiosos del tema provenientes de universidades o bibliotecas, tanto de la República Popular China como de Taiwán, Suiza, Francia y Estados Unidos, aparte de ti, que serás el único ponente en español. ¿Podríamos decir que se trata del encuentro internacional más importante que se vaya a realizar sobre la BSI?

-        No solo creo que es muy importante, sino también el único que yo sepa que se ha realizado sobre la totalidad de su existencia: el período ginebrino, rico en eventos y publicaciones propias; el pasaje por Uruguay con todas sus tribulaciones y su permanencia en Taiwán, así como estudios orientalistas directamente vinculados con la BSI, en especial en lo que tiene que ver con la difusión de la música china en Occidente. Creo que significará un salto sustancial en la investigación y conocimiento de esta Biblioteca que ha sido considerada la mayor joya cultural de China en Occidente.    

 

 -----

Referencias:

"De la dinastia Qing a Luis Batlle Berres : la biblioteca china en Uruguay". Alfredo Alzugarat. Biblioteca Nacional del Uruguay - Departamento de Investigaciones y Archivos Literarios. Primera Edición: 2014. Segunda Edición: 2019. ISBN 978-9974-550-92-6 

https://es.wikipedia.org/wiki/Biblioteca_Sino-Internacional

https://bibliosinoint.ch/wp/en/symposium/


08 febrero, 2024

Mi primer Año del Dragón en China, año 1976. Lindo haberlo vivido....

Después de haber llegado a Beijing en julio de 1975, al poco tiempo de haber entrado el nuevo año, tuve la ocasión de conocer una de las tradiciones culturales más importantes de la civilización china: la Fiesta de la Primavera, que en ese año de 1976, marcaba el comienzo del llamado "Año del Dragón". Desde entonces han pasado ya 48 años y este 10 de febrero pasaré mi quinto Año del Dragón relacionado con China.

Entonces yo vivía con mis padres y una de mis hermanas, Laura, en el "Hotel de la Amistad". Con Laura ya habíamos comenzado nuestras clases de chino, ibamos y veníamos entre el Hotel y el Instituto (ahora ya es una Universidad) en bicicleta, disfrutado como niños al ver la nieve por primera vez en nuestras vidas y poco a poco nos íbamos adaptando a vivir del otro lado del mundo sin contar con todos los avances tecnológicos que tiene actualmente la humanidad. 

En enero de 1976 cumplí mi mayoría de edad en Beijing. Apenas estábamos empezando a "luchar" para aprendernos los cuatro acentos de la pronunciación en chino, a que nuestra lengua hiciera movimientos particulares y a soplar o no al pronunciar diferentes palabras. No llevábamos muchos caracteres aprendidos, o los aprendidos se nos olvidaban, cuando de pronto empezaron a aparecer en las entradas a los edificios faroles rojos y carteles con dos palabras que aprendimos, no sé si a escribir bien, por lo menos a reconocer: 春节 (Fiesta de la Primavera).

¿Qué era eso de la "Fiesta de la Primavera"? Ni idea. Es verdad que viniendo de Uruguay habíamos empezado a vivir las cuatro estaciones del año "al revés". O sea que esa "primavera" equivaldría a nuestro otoño uruguayo...pero en la escuela habíamos aprendido que el otoño en Uruguay empezaba el 21 de marzo. ¿Por qué en China iban a celebrar una fiesta que llamaban "de la primavera" un 31 de enero en medio de un frío invernal?



En un país en el cual se trabajaba seis días a la semana (¿quién utilizaba entonces el término 周末 -fin de semana-?), y los únicos feriados del año eran el 1 de enero, 1 de mayo y 1 de octubre, ésta tenía que ser una ocasión muy especial ya que mis padres -al igual que los demás trabajadores chinos- iban a tener cinco días de vacaciones.

En esos años sin Internet, lo poco o mucho que fuimos aprendiendo sobre este acontecimiento tan importante en la vida del país fue a través de los que nos comentaban los colegas de trabajo de mis padres, los funcionarios del llamado "Buró de Expertos", y algunos profesores chinos, todo ello por supuesto en español, ya que nuestro nivel de chino no daba para más que intercambiar algunos saludos.

El único libro que teníamos como referencia era la Guía Nagel´s sobre China, en francés, publicada en 1975, un verdadero tesoro que aún se conserva en la casa de mi familia en Montevideo.

El 1 de enero habíamos celebrado el año nuevo, y entonces los dos caracteres chinos que aparecían en las calles decían 元旦 y ahora "descubrimos" que íbamos a pasar otro, esta vez según un llamado "Calendario Agrícola" 农历 con miles de años de historia, relacionado con las fases de la luna y también con la posición de la Tierra en relación con el Sol, y que tenía una importancia fundamental tanto en la cultura del país como en sus actividades agrícolas.

La Fiesta de la Primavera marcaba el fin del invierno y el comienzo de la primavera para las actividades agrícolas, aunque obviamente debido a la extensión territorial de la China del siglo XX, no en todas las partes del país iba a ser igual.

Nos explicaron que había doce animales en ese calendario, y que el dragón era el único mitológico de ellos, y también las características de la gente que había nacido en un año determinado y relacionado con uno de esos doce animales. Cada doce años, se volvía a repetir el ciclo. A diferencia de nuestro horóspoco que tenía relación con el mes en el cual habíamos nacido, en China era diferente, y lo que determinaba el caracter de una persona era el año del nacimiento. 

En la China de 1976, sin embargo, ningún medio de prensa hizo referencia al "Año del Dragón". Eso era algo que sólo se mencionaba a nivel popular. A veces, en lugar de preguntar la edad, lo que se quería era saber el animal correspondiente al año en el que uno había nacido. Esto era también muy importante a la hora de concertar un matrimonio; los nacidos en el año del animal X no se llevan bien con los nacidos en el año Y, o viceversa. 

El del dragón, nos dijeron, era un año muy importante, ya que era un "animal" muy relacionado con la civilización china. Y por eso muchas parejas querían tener un "hijo dragón". Entonces, la política de planificación familiar permitía tener dos hijos por matrimonio, no sólo uno como ocurrió años más tarde. Pero para mantener esa política, en esos días se incrementaba la propaganda sobre la planificación familiar y los métodos anticonceptivos.

En esa época había matrimonios que vivían todo el año separados, y la "Fiesta de la Primavera" era la única ocasión que tenían para estar juntos, y por eso las brigadas de planificiación familiar se encargaban de recordarles cuál era la política del gobierno al respecto y les "asesoraban" y "aconsejaban" sobre el uno de diferentes métodos anticonceptivos.

Aparte de esos matrimonios que se reecontraban, la tradición marcaba que en esa "Fiesta de la Primavera" las familias tenían que reunirse para entrar juntos a ese "año nuevo" y por eso, todos aquellos que podían hacerlo, con el permiso de sus instituciones de trabajo, intentaban regresar a sus 老家 (la tierra natal de sus antepasados) Y ya entonces, en una China que tenía poco más de 900 millones de habitantes, se producía el fenómeno conocido como 春运 (los viajes con ocasión de la Fiesta de la Primavera) el mayor desplazamiento en el mundo de seres humanos en tan poco espacio de tiempo, fenómeno que se mantiene hasta la actualidad, aunque con mejores y más modernas infraestructuras y medios de transporte.

Mis padres, al igual que todos los extranjeros que trabajaban en organismos estatales chinos, fueron invitados a un "banquete" en el Gran Palacio del Pueblo, y los organismos donde trabajaban nos invitaron a una o dos casas de sus compañeros de trabajo para cenar o almorzar juntos. 

Fue para nosotros la primera vez que íbanos a entrar en la vivienda de un ciudadano chino. La cena fue en apartamento de un edifico de cinco pisos, sin ascensor, donde nos esperaban -aparte de los dueños de casa- otros compañeros de trabajo. Allí tuvimos que participar en "la ceremonia" de hacer 饺子 jiaozi,una especie de empanadilla o raviol. Con una mano teníamos que agarrar una porción redonda de masa de  harina y con la otra, ayudados por los palillos, había que agregarle el relleno y luego cerrar la empanadilla, y cerrarla bien era lo más importante. Confieso que no se me dio nada bien este experimento. Pero era un acto de "unión" entre todos los que estábamos en la casa.

Pero los jiaozi eran sólo una parte de una cena que incluía todo tipo de platos (entradas frías, platos calientes con carne, verduras y doufu) y durante la cual se bebía mucho y siempre brindando entre todos. Otra de las cosas que aprendimos fue que la cena tenía que terminar con un pescado, debido a un juego de palabras que querían decir que tenía que ser un año de abundancia.

También "aprendimos" entonces que durante la Fiesta de la Primavera era el período del año durante el cual la gente comía más y mejor. En algunos casos, era la única oportunidad que tenían de comer carne, como lo recordó el actual presidente, Xi Jinping, hablando de sus años de juventud en el campo. También era la época del año en la cual la gente se acostaba más tarde y la televisión y la radio extendían sus horarios de emisión para transmitir la "velada nocturna de la Fiesta de la Primavera", un programa especial con cantos, danzas, y los famosos diálogos comicos 相声 que tanto hacían reir a la gente. 

En una China muy convulsionada por movimientos políticos (el primer ministro Zhou Enlai acababa de fallecer el 8 de enero), la Fiesta de la Primavera era el momento del año "menos político" y más divertido y lúdico.

En las universidades, fábricas y organismos estatales, se donaban o vendían a bajo precio, huevos de gallina u otros alimentos que normalmente no eran tan fáciles de conseguir y también se regalaban a vendían entradas de cine, de teatro, o de otros espectáculos.

Además los dirigentes máximos del Partido tenían que "visitar a las masas", a los héroes de la guerra, y lo mismo hacían los dirigentes de cada institución. Así los jefes y compañeros de trabajo de nuestros padres nos visitaron en el Hotel de la Amistad.

A medida que, como consecuencia de la apertura al exterior de China, la globalización y la aparición de modernas técnicas de comunicación, la "Fiesta de la Primavera" es cada vez más conocida, y celebrada en diferentes países del mundo, no dejo de asombrarme al ver, en nuestro mundo de habla hispana, expresiones como las de "Año del Dragón de Madera"; será por mi torpeza, pero no llego a entender por qué desde el exterior -incluídas algunas personalidades y entidades amigas y muy relacionadas con China- utilizan expresiones que no veo ni en China, ni en los países o regiones con gran influencia china -como por ejemplo Singapur-. .... En fin, como dice el refrán "doctores tiene la Iglesia"... 

Nuestra primera Fiesta de la Primavera fue un maravilloso descubrimiento sobre aspectos de la cultura china que desconocíamos por completo, y desde hace más de 48 años no he dejado de aprender y de "descubrir" cosas muy interesantes sobre la misma.  Lo lindo fue aprenderlo in situ, observando, escuchando, como tantas de las cosas que he aprendido y sigo aprendiendo del país.

Casi ya medio siglo después, y a punto de entar en mi quinto Año del Dragón, las cosas han cambiado mucho como consecuencia del rápido y espectacular desarrollo económico y social que ha vivido China; pero aún hay fenómenos o acontecimientos que me recuerdan a ese año 1976, como por ejemplo las visitas de los dirigentes a "las masas" o lo del 春运  -a pesar de los grandes avances en las infraestructuras del país - al tiempo que han surgido -o resurgido- costumbres que no existían entonces como por ejemplo la de regalar "sobres rojos", con dinero, a familiares y amigos.

En todo caso, como dice la canción: "lindo haberlo vivido pa´poderlo contar". O como dijo el maestro, "vivir para contarlo". 

@PabloRovetta 


01 febrero, 2024

Un libro imprescindible sobre la literatura latinoamericana en China

¿Cuál fue la primera obra de un escritor latinoamericano que se publicó en la República Popular China? Desde entonces, ¿cuántas obras de autores de la región se han publicado en chino? ¿Cuántos escritores, y cuántas obras, han visto la luz en el país asiático? ¿Cuáles fueron los más traducidos? ¿De qué países?

Las respuestas a éstas y otras preguntas las da la Doctora Mónica Lou Yu en su libro “Paisajes exóticos-Un recorrido gráfico de la literatura latinoamericana en China” (异乡的风景-图说拉美文学在中国), editado por Blossom Press (朝华出版社) y presentado el pasado lunes 29 de enero en Beijing.

Pero el libro de Lou Yu -en edición bilingüe chino/español- no es sólo es una fría recopilación de estadísticas, sino un estudio académico, con muy interesantes datos, información y análisis y reflexiones sobre la historia de las publicaciones en chino de escritores de América Latina y el Caribe.



No es la primera vez que Lou Yu -doctorada en Literatura Latinoamericana e investigadora del Instituto de Estudios Latinoamericanos de la Academia China de Ciencias Sociales- se adentra en este campo. Ya en el 2016 había publicado un informe titulado “La presencia de la literatura latinoamericana en China (1949-2016)”.

Esta vez el libro presentado es más que un “informe”, y abarca el período 1949-2019, o sea los primeros 70 años de vida de la República Popular China. La autora -que aparte de China estudió en España y México- es ella misma traductora -por ejemplo se encargó de la versión en chino de “Respiración Artificial” de Ricardo Piglia- y ha publicado decenas de artículos y traducciones en revistas académicas tanto chinas como extranjeras.

Uno de los primeros datos interesantes que encontramos en su obra es que en el período estudiado se publicaron en China 1.037 libros de más de 300 escritores, entre lo cuales no sólo se incluyen aquellos de habla hispana, sino también de países como Haití o Guyana.

Lou Yu analiza diferentes aspectos de la presencia de la literatura latinoamericana en China.

Lo que hace en primer lugar es dividir en tres períodos los 70 años estudiados. El correspondiente a 1949-1978 (cuando muchas de las obras no fueron traducciones directas, sino del inglés o el ruso); el que va de 1979 -una vez comenzadas las reformas y apertura al exterior de China- a 1999, y por último el que abarca desde el comienzo del siglo XX hasta el 2019.

Al mismo tiempo desglosa cómo a partir de que China se va abriendo al exterior hasta la actualidad las preferencias de las editoriales y de los lectores se van diversificando y cambiando, pasándose de los “clásicos” como Pablo Neruda, Nicolás Guillén o Jorge Amado en los primeros años, al “descubrimiento” de Jorge Borges en la década de los 90 - destaca "la conmoción" que este escritor causó entre los lectores chinos-  y a autores del “boom” del “realismo mágico” como Gabriel García Márquez o Mario Vargas Llosa.



     La Dra. Lou Yu en el acto de presentación del libro
        (Foto tomada del canal de WeChat de CECLA)

Como dice la autora, “en las últimas dos décadas, en especial desde 2013, la publicación de la literatura latinoamericana ha transcurrido entre lo ‘antiguo` y lo ‘nuevo’”, y pone como ejemplo la traducción de obras de escritores “nuevos” o hasta entonces desconocidos para el público chino, como es el caso de Eduardo Galeano o Roberto Bolaño.

Por último, llama la atención sobre cómo ha aumentado entre los libros publicados la proporción de escritores jóvenes y de mediana edad, “voces de la literatura latinoamericana contemporánea”, como Alejandro Zambra, Samanta Schweblin, Valeria Luisello o Paulina Flores.

Otro aspecto interesante de la obra de Lou Yu es el análisis que hace sobre la influencia que tuvieron en escritores chinos la literatura latinoamericana en general, y el “realismo mágico” en particular. Cita en concreto a Mo Yan -Premio Nobel de Literatura en el 2012- y a Yan Lianke, quienes han reconocido la influencia que el “realismo mágico” tuvo en sus carreras literarias.

Pero aparte del análisis sobre las traducciones, el libro dedica un espacio especial a analizar y proporcionar información sobre los estudios publicados en China sobre la literatura latinoamericana en general y sobre algunos autores concretos, incluyendo en algunos casos biografías de estos (Gabriel García Márquez, Jorge Luis Borges, Juan Rulfo o Mario Vargas Llosa entre otros).

El estudio es tan completo que hace una reseña de los principales traductores chinos, las editoriales del país que han publicado obras latinoamericanas, los autores más publicados, los países con más publicaciones de sus escritores y un largo etcétera y toca temas tan interesantes como el de los derechos de autor.

Por último, pero no menos importante en absoluto, es que aparte de toda una serie de interesantes gráficos, el libro dedica nada más y nada menos que 270 páginas a un “Catálogo bibliográfico de la literatura china latinoamericana publicada en China”, que incluye, ordenados por países, los nombres del autor, el título original, el traductor, la editorial, el año de publicación y … las portadas en color de todos y cada uno de esos libros.

En diálogo con este autor, Lou Yu reconoce que la parte más difícil de su trabajo fue la de encontrar las tapas de todos y cada uno de los libros, “sobre todo los publicados en los años 50, 60 y 70”. Esas 270 páginas a color son como para hacer un mosaico colorido sobre la literatura latinoamericana en China.

Otro anexo interesante es el “Catálogo bibliográfico de las obras de autores chinos sobre la literatura latinoamericana”.

En definitiva, creo que es un libro imprescindible para todas aquellas personas e instituciones (Embajadas, Institutos de Enseñanza, Bibliotecas, Institutos de Investigación, etc.) interesadas en los intercambios culturales entre China y América Latina.

Por ahora, y lamentablemente, el libro sólo puede adquirirse en China y en las páginas web de 当当 (en el enlace https://product.dangdang.com/29680984.html) y de 京东, aunque en esta última hay que registrarse.

Ojalá, bien por los esfuerzos de editoriales y/o instituciones chinas o latinoamericanas, este libro de gran valor pueda estar al alcance de los lectores en América Latina, España, y en aquellos lugares del mundo donde haya personas o instituciones interesadas en el tema de la literatura latinoamericana en China.

Y para terminar, volvemos al comienzo: la primera obra de un escritor latinoamericano que se publicó en la República Popular China fue “Que despierte el leñador” de Pablo Neruda, traducida del inglés y publicada en 1950, cuando la República Popular China acababa de nacer. Detalles tan interesantes como éste son los que el lector encontrará con facilidad en esta importante obra.






27 enero, 2024

"Año del Dragón", o "Año del Dragón de Madera"

Se acerca la Fiesta de la Primavera en China, y según el Calendario Agrícola, el país entrará en "el Año del Dragón". Y en páginas y textos de organizaciones y personas interesadas por China y su cultura fuera del país, ya estamos viendo referencias al "Dragón de Madera".....

Todos los años pasa lo mismo; fuera de China -por lo menos en nuestro mundo de habla hispana- detrás de cada uno de los 12 animales que componen el calendario agrícola es normal ver que se agrega un "de metal, de fuego, de madera, de agua, de tierra".

No me considero un experto en China pero llevo 48 años relacionado con China, donde ya en 1976 pasé mi primera Fiesta de la Primavera -precisamente cuando entró un Año del Dragón- y ahora estoy a punto de entrar en mi quinto año de este animal mitológico tan relacionado con la cultura china.

Muchas cosas de este país de cultura milenaria son "complicadas" y difíciles de entender para quienes venimos de América Latina y España. Pero a veces se trata de tener sentido común y aplicar aquello de "donde fueres, haz lo que vieres" y no complicar más las cosas.

Llevo algunos días en Beijing, y todas las referencias que veo sobre este año nuevo sólo hablan de "龙年", "Año del Dragón" o "Year of the Dragon". Antes de llegar a Beijing estuve en Singapur y las referencias eran las mismas que en la República Popular.

La palabra 龙年 , y sólo 龙年, es la aparece en los discursos, en los artículos, en los carteles de la calle, en los programas de radio y televisión, en las tiendas, en la publicidad, en los mensajes de felicitación, en los calendiarios y un largo etcétera. Y "Año del Dragón" es la palabra que aparece en las ediciones en español de publicaciones como "El Diario del Pueblo", "China Hoy" u otras publicaciones oficiales.

En ningún lado, en ninguna ocasión de las citadas, he visto una sola referencia al "Año del Dragón de Madera".

Entonces, eso del "Año del Dragón de madera" ¿es un "invento"? No, en realidad, sí existe una relación entre este Año del Dragón y los llamados cinco elementos (metal, madera, fuego, agua y tierra), que son parte de la filosofía china y tienen relación con la astrología o la medicina china.

Y efectivamente el año que empieza el 10 de febrero tiene uno de los 10 troncos ( 十干), una de las 12 ramas ( 十二支) y uno de los cinco elementos (五行), en este caso la madera. 

Lo que pasa es que eso no se usa a la hora de hablar del año que empieza o de felicitar, sino más bien para definir el destino (命) de la persona que nacerá este año. Por eso se puede hablar de  木龙命 (el "destino" del dragón de madera), pero no se habla del 木龙年. O sea, lo del elemento madera sí es importante para la gente que crea en los "horóscopos chinos", incluidos millones de habitantes del país; pero no a la hora de denominar el año y celebrarlo. 

Pero, como hemos dicho, la cultura china es "complicada", y el tema de los troncos, las ramas y los elementos exigiría una explicación mucha más profunda y detallada.

Al igual que hacemos con las fiestas de otras civilizaciones y culturas de nuestro ancho mundo, llamémoslas como lo hacen los pueblos de las mismas. ¿Por qué tenemos que utilizar expresiones que no usan los pueblos de esas civilizaciones para hablar de sus fiestas tradicionales? Sin pretender ofender a nadie, ¿no es un poco una posición de "superioridad" el querer decirle a los chinos -de todo el Planeta- qué es lo que ellos festejan?

Espero no haber ofendido con este comentario a tanta gente e instituciones que con mucha buena voluntad hacen esfuerzos para acercar la cultura china a nuestro mundo de habla hispana. 

No me considero "dueño" de la verdad absoluta y lo que pretendo -no sé si con acierto o no- es aclarar -desde mi muy modesto punto de vista y desde mi experiencia- un tema tan importante en la cultura china. 

Por supuesto estas páginas están abiertas para cualquier comentario o crítica. 

02 enero, 2024

In Memoriam Dong Yansheng

Con profundo dolor acabo de recibir la noticia del fallecimiento de Dong Yansheng. La lista de adjetivos para calificar a este Gran Hombre (sí, con mayúsculas) sería interminable, y por eso prefiero, como desde el día que le conocí hace ya casi medio siglo llamarle "el tío Tom".

Era 1975, yo acababa de llegar a Beijing con mi familia, y fue uno de los primeros ciudadanos chinos que conocí -junto también a la prestigiosa profesora Cen Chulan- que hablaban español, algo que a mí me pareció "normal". Yo tenía solo 17 años, nunca había salido del Río de la Plata y por eso no me resultó extraño encontrar gente que lo hablase, aunque yo estuviese al otro lado del mundo.

Desde el primer día descubrí una persona muy simpática y con mucho sentido del humor, ese mismo sentido del humor con el cual nos decía que le llamásemos "el tío Tom". 

Y así le llamé siempre cuando hablaba con él o le escribía ya por WeChat durante las décadas en las cuales estuve en contacto con él. Además era una de las pocas personas con las cuales yo no pronunciaba una sola palabra en chino.

¿Qué voy a contar de Dong Yansheng que cualquier persona relacionada con los mundos de habla hispana y china no sepan? ¿Qué fue uno de los pioneros en la enseñanza de la lengua de Cervantes en China? ¿Que fue quien hizo una traducción directa de "El Quijote" ? ¿Que escribió tantos manuales? 

Fueron muchos los premios y condecoraciones que recibió, pero como los verdaderos sabios -sí, sin comillas- siempre fue una persona modesta, sencilla. Si coincidía con él en algún acto oficial en España o China siempre podíamos charlar un ratito, y siempre me contaba algún chiste.

Aún conservo en el WeChat un mensaje "Me acaban de enviar un chiste que casi me mata de risa"...y terminaba diciendo "No te rías solo...pásalo a tus grandes amigos".


Años atrás en el Instituto Cervantes de Beijing

No buscaba fama ni riquezas y por eso cuando se jubiló tuvo el gran gesto de crear una Fundación para "la excelencia docente y la investigación". 


Junto a la profesora Cen Chulan, otra de las pioneras en la enseñanza del español en China
Junto a la profesora Cen Chulan, otra de las pioneras
 en la enseñanza del español en China


El periodista uruguayo Eduardo Delgado, del canal de televisión TV-Ciudad de Montevideo, tuvo el gran privilegio de entrevistarlo en el 2022 en su casa de Beijing, en lo que fue la última entrevista que concedió a un medio de prensa.

Hoy Eduardo Delgado ha vuelto a poner en las redes el enlace de esa entrevista, con la cual me emociono hoy al verla, y que dejo a disposición de los lectores en este enlace

¿Por qué se nos tienen que ir los buenos?

Descansa en paz, querido tío Tom. Ya nos encontraremos en algún momento, en otro lugar, y disfrutaré hablando contigo y escuchando tus chistes.


28 noviembre, 2023

Uruguay y China: un sano ejemplo para la diplomacia mundial

Después de varios meses de "parón" regreso a estas páginas para comentar la reciente visita a China del presidente uruguayo Luis Lacalle Pou. Al fin y al cabo éstas son unas "Reflexiones Orientales" y el viaje del presidente de la República Oriental a la República Popular en el Oriente no podía faltar en este espacio.

Empezando por el final, me gustaría decir que la visita del mandatario uruguayo fue muy exitosa en todos los aspectos y muy necesaria ya que habían pasado siete años desde la anterior visita presidencial, del Dr. Tabaré Vázquez. Además puede considerarse como un broche de oro a un año en que se está celebrando el 35º aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas entre ambos países.

Las cosas han cambiado mucho -para mejor- en los últimos siete años, y hemos visto un gran salto adelante en las relaciones a todos los niveles, desde el punto de vista cuantitativo pero, más importante, en lo cualitativo.




Uruguay cuenta ahora con una mayor presencia oficial en China gracias a la inauguración de los consulados en Guangzhou en el 2019, y en Chongqing un año más tarde. Hasta entonces, y desde el 2003, sólo contaba con el consulado de Shanghai en la parte continental de China. Entre otras, también hay una Oficina del INAC (Instituto Nacional de Carnes), recién inaugurada en la capital del país.   

La embajada uruguaya en la capital china y sus tres consulados han realizado en estos últimos años una brillante labor de promoción, en especial, pero no sólo, con un muy inteligente y activo uso de las redes sociales chinas, para que en China se conozca más nuestro país, su arte y cultura, su gastronomía y sus atractivos turísticos entre muchas otras cosas.

Puedo decir que Uruguay, y en especial su embajador Fernando Lugris, tiene una presencia en los medios de comunicación chinos mucho superior a lo que es nuetro país demográficamente -un barrio de Beijing- y en comparación con muchos de nuestros vecinos continentales con una historia mucho más dilatada de relaciones oficiales con la República Popular.

En lo comercial, aparte de producos ya tradicionales de los últimos años como carne o los lácteos -CONAPROLE ya había abierto una Oficina de China en el año 2013-  en los últimos años se está trabajando seriamente para que otros productos uruguayos sean conocidos en el país, entre ellos los vinos. En lo oficial, China ha ido habitando paultinamente la entrada de otros productos tradicionales de las exportaciones uruguayas -uno de los últimos ejemplos ha sido el sorgo este mismo año- al tiempo que, aparte de la carne o soja, es de destacar el importante papel que juega la celulosa o la leche en polvo en las ventas al país

Tampoco debemos olvidarnos que el fútbol es el "arma mágina" para que diversos aspectos de Uruguay y sus productos sean conocidos hasta en el último rincón del país. Esta "arma márgina" ha sido utilizada con inteligencia por la embajada de Uruguay durante la participación en ferias especializadas o en viajes institucionales por el interior del país. Recuerdo con orgullo, que cuando llegué a China con 17 años de edad en 1975, al decir que era uruguayo, la gente relacionaba el nombre de "Wulagui" con el fúlbol.

Para terminar este breve resumen, no podemos dejar de mencionar un aspecto político muy importante: la adhesión de Uruguay en el 2018 al proyecto de "La Franja o la Ruta" (o para simplicar "la nueva Ruta de la Seda") una inciciativa del presidente Xi Jinping.

En este contexto, la visita de Lacalle Pou podríamos decir que era algo "imprescindible" y sus positivos resultados marcan el comienzo de una nueva etapa en las relaciones bilaterales, que han subido un gran escalón en lo político, económico y comercial, cooperación científica y educativa, entre tantos otros.

Uno de los resultados más importantes de la visita es la decisión de ambos gobiernos de establecer una Asociación Estratégica Global. Este proceso había comenzado en el año 2016, como consecuencia de la visita del Dr. Tabaré Vázquez a China, cuando se decide establecer una Asociación Estratégica y que ahora ambas partes deciden "elevarla" y llevarle al campo de lo global. No se trata de un simple cambio de palabras, ya que la ahora acordada Asociación Estratégica Global es el máximo nivel que pueden alcanzar las relaciones diplomáticas entre China y otros países.  

En el aspecto comercial bilateral, entre otras cosas, se logró ampliar la gama de productos qiue van a poder entrar al mercado chino y se decidió reducir los plazos administrativos para la exportación de ciertos productos. Esto tendrá un importante efecto paras incrementar el valor de las ventas uruguayas.

Como es sabido, el presidente Lacalle Pou ha sido y es un firme defensor del libre comercio, y en el caso concreto de China se ha propuesto casi desde la asunción de su mandato la concreción de un Tratado de Libre Comercio (TLC) con la República Popular, pero ha tenido y tiene que enfrentarse a la oposición de Argentina y Brasil que desde el Mercosur pretenden aferrarse -en mi modesta opinión- a un modelo de integración obsoleta y que en la práctica no ha tradido muchos beneficios al país. Y, lo que es para mí peor, a las críticas de una oposición que parece que pensara en ello de "estaré en contra de todo aquello en lo cual esté a favor el presidente". Como si lo del TCL no hubiese sido algo de lo cual se empezó a hablar durante el gobierno del Dr. Tabaré Vazquez del, ahora en la oposición, Frente Amplio.

Mientras que en el Comunicado Conjunto se menciona que ambas partes "se congratulan por la finalización del Estudio Conjunto de Factibilidad sobre un posible Tratado de Libre Comercio Uruguay-China" -es importante que esto se haya reflejado en los documentos firmados- se reafirma la disposición a promover la construcción de una "asociación de libre comercio" al tiempo que se reafirma que están dispuestas a "promover el diàlogo en materia de libre comercio entre el Mercosur y China". Una fórmula diplomática, en mi opinión, de apoyo a Uruguay en sus asperaciones, pero sin ofender a los dos socios de Mercosur que también mantienen buenas relaciones diplomáticas con Beijing: Argentina y Brasil. Un detalle no menor al respecto es que Paraguay, miembro de Mercosur, no tiene relaciones diplomáticas con China lo cual, entre otros muchos factores, podría retrasar, no se sabe hasta cuándo, la concreción de ese acuerdo. Es interesante que se habla de Mercosur-China y no de diálogo en materia de libre comercio entre los miembros del Mercosur y China.

Como resultado de la visita se firmaron más de veinte acuerdos, algunos de ellos muy destacados como el incremento del número de becas para que jóvenes uruguayos estudien en China; la cooperación en el ámbito de la agricultura, y de la ciencia y tecnología agrícola.

La mención al "libre comercio" estuvo presente en muchos de los discursos del presidente uruguayo, y en este sentido ambas partes destacaron la importancia del mismo en el escenario internacional.

Aparte de los miembros del gobierno que formaron parte de la delegación oficial, el presidente Lacalle Pou estuvo acompañado por empresarios y destacados investigadores, y en su estancia en Beijing tuvo oportunidad de contacatar con representantes de empresas uruguayas en China así como de la cada vez mayor colonia oriental en el país.

En un mundo cada vez más dividido en extremos, donde parece que existiera sólo el negro y el blanco, y en cual China es una fiel partidaria de la multipolaridad en las relaciones internacionales, el caso de Uruguay y China merece una mención especial como una muestra de que países con diferencias demográficas, territoriales, culturales, históricas y sobretodo de sistemas políticos, pueden "llevarse bien" y llegar a acuerdos en beneficio mutuo. 

Las relaciones entre Uruguay y China desmontan la teoría de algunos medios de prensa, gobiernos y organismos occidentales que sin tapujos hablan de que China estaría "colonizando" América Latina. Por cierto son muchos de esos gobiernos y organismos internacionales, como la Unión Europea, quienes cierran las puertas a la entrada de productos latinoamericanos que sin embargo sí se pueden exportar a China.

Desde el establecimiento de relaciones diplomáticos hace ya 35 años, todos los presidentes de las tres principales fuerzas politicas que han gobernado y gobiernan Uruguay han visitado China. Las relaciones con China han favorecido a Uruguay en todos y cada uno de esos gobiernos. 

Es una pena que, dentro de un marco cada vez más radicalizado en la política interna uruguaya, desde la oposición se haya criticado desde el principio la iniciativa del presidente Lacalle Pou de "abrirse al mundo", al tiempo que no se hayan celebrado -más bien al contrario- los logros obtenidos por esta visita.